jueves, 13 de marzo de 2014

"Andolina"



Cuando estudiamos las lenguas romances de España, vemos que todas las habladas actualmente en nuestro país a excepción del vascuence o euskera son dialectos del latín.

Distinguimos entre ellas  el castellano, el gallego, y el catalán, con sus variantes dialectales mallorquina y menorquina. Respecto al valenciano hay una gran polémica: para unos es un dialecto del latín; para otros, es un dialecto del catalán.

En este panorama general, nos olvidamos a veces de otras lenguas minoritarias, como es el caso del asturiano o bable, que, sin embargo, tienen también el estatuto de dialectos del latín, pues tienen unos rasgos propios y distintivos que han determinado su evolución diferenciándola de las otras. 

En asturiano, por citar algunos rasgos al azar,  se conserva, por ejemplo, la –u de los sustantivos masculinos (tesu, picu, fayéu, fusu, puntu, oru…), que en castellano evolucionó a –o, conservándose sólo en palabras muy cultas como espíritu, tribu o ímpetu

Otro rasgo típico es la palatalización de la l- inicial latina, que conservada en castellano,  se convierte en asturiano en ll-: lazo/llazu, lengua/llingua, luna/lluna…

Un rasgo que afecta a la morfología verbal es que el asturiano no ha creado, como el castellano, un pretérito perfecto compuesto del tipo he amado, sino que conserva el original latino amé, procedente de amaui, con el doble valor que tenía en la lengua del Lacio de he amado y amé.

En fin, son muchos los rasgos fonéticos y morfológicos que atestiguan que el bable, con sus variedades dialectales occidentales, centrales y orientales, es una lengua con una identidad propia..

El otro día escuchábamos en clase de 4º de Latín esta bonita canción asturiana titulada “Andolina”, es decir, “Golondrina”, de los hermanos Tejedor,  extraída de su disco Llunáticos de 2003, cuya letra se debe a Lisardo Lombardía, y que acabamos tarareando casi todos sin querer.


ANDOLINA

Yá va l'andolina degolando'l tesu,
Les sos ales plata, son rellumos de la mar.
Esnala na tarde camín d'otros cielos,
Nel so picu paez llevar el mio triste cantar.

La seronda ambura per ente'l fayéu,
Rustien los carbayos, amortez col día'l llar,
Los mios pensamientos, caricós d' ausencia.
El mio amante echo a faltar ¿onde s'alcontrará?

ESTRIBILLU:
Andolina, si lu vieres al pasar,
Dulce amiga, nun-y niegues el cantar,
Compañera, porque se que tornará
Y el so llazu d' amor mio cuerpo abrazará.

Baxa la borrina hacia la llanada
Y l'orbayu texe col so fusu de metal
Los homes afonden al pisar la buelga
Los fugaos son a  llegar al pié de la mayá

Andando sollertes ente les cabañes,
Sienten l'andolina mermurando'l so cantar
Al roxu que manda camúda-y la cara,
el so arrogante coral ta'l puntu d'argayar.

(ESTRIBILLU)

Pela primavera dende l'alborada
Escucaba el tesu. Yera so estrella polar.
Norteaba los vientos, sentá n'antoxana,
Pero una pega namás posóse na pumar.

Un anillu d'oru colgó del arfueyu,
Recoyólu adulces colos güeyos de cristal.
Vistía de prieto, mirábalu siempre
De la que diba entonar el so doliosu añar.

(ESTRIBILLU)

)

GOLONDRINA

Ya va la golondrina remontando el collado,
Sus alas de plata son destellos de la mar,
Vuela en la tarde buscando otros cielos
En su pico parece llevar mi triste cantar.

El otoño arde a través del hayedo,
Crepitan los robles, muere con el día el hogar.
Mis pensamientos, tizón de ausencia.
Echo de menos a mi amante, ¿dónde se hallará?

(ESTRIBILLO)
Golondrina, si lo vieras al pasar,
Dulce amiga, no le niegues el cantar,
Compañera, porque sé que regresará
Y su lazo de amor mi cuerpo abrazará.

Baja la niebla hacia la llanura,
Y la llovizna teje con su huso de metal.
Se hunden los hombres al pisar el sendero nevado,
Los maquis consiguen llegar junto a la majada.

Yendo vigilantes entre las cabañas,
Oyen a la golondrina murmurando su cantar
Al pelirrojo que manda se le demuda la cara,
Su generoso corazón se está apunto de quebrar.

(ESTRIBILLO)

Durante la primavera, desde el amanecer
Atisbaba el collado. Era su estrella polar.
Oteaba los vientos, sentada en la antojana
Pero sólo una urraca se detuvo en el manzano.

Un anillo de oro colgó del muérdago,
Lo recogió lentamente con sus ojos vidriosos.
Vestida de negro, lo miraba siempre
al comenzar a entonar su desconsolado añorar.

(ESTRIBILLO)

 

2 comentarios: